El contractualismo [1] [2] es una corriente filosófica que describe el papel y la estructura de las normas sociales y éticas. La mayoría de las ramas del contractualismo se basan en la idea de que, debido a la irracionalidad del hombre, la sociedad debe elegir un gobierno que mantenga su bienestar y establezca normas vinculantes y respaldadas por la mayoría a través de acuerdos.
Teóricos contractuales: Hugo Grotius (1625), Thomas Hobbes (1651), Samuel Pufendorf (1673), John Locke (1689), Jean-Jacques Rousseau (1762) e Immanuel Kant (1797); más recientemente John Rawls (1971), David Gauthier (1986) y Philip Pettit (1997).