Una microexpresión es una expresión facial breve e involuntaria que aparece en el rostro de una persona que intenta ocultar o reprimir una emoción . Las microexpresiones no están sujetas a control consciente, es decir, aparecen independientemente del deseo de una persona.
Para un observador inexperto, las microexpresiones suelen ser invisibles, ya que duran de 1/25 a 1/5 de segundo, mientras que las macroexpresiones duran de 1 a 10 segundos. Sin embargo, existen métodos para aprender a reconocer microexpresiones, como el programa METT (Micro Expression Training Tool).
Tampoco siempre es posible reconocer una mentira por microexpresiones, ya que cada persona tiene sus propias emociones y expresiones para cada caso. Por ejemplo, la sorpresa dura alrededor de 0,5 segundos.
Las microexpresiones reflejan la actitud real de una persona ante lo que está sucediendo y, si no se corresponden con las palabras del interlocutor y/o sus macroexpresiones (que son relativamente fáciles de controlar arbitrariamente), sirven como un signo confiable de engaño (no necesariamente consciente), aunque ellos mismos expresan sólo emoción. El término es utilizado por Paul Ekman en su teoría del engaño [1] .
La teoría de las microexpresiones de P. Ekman se utilizó como base del guión de la serie Lie to Me .