El impuesto quitrent, que existía bajo este nombre, surgió en 1723 como un impuesto adicional de capitación de los unipalacios y tenía por objeto equiparar los pagos de estos últimos con los pagos de los campesinos palaciegos y patrimoniales, que pagaban, además de la impuesto de capitación, otro quitrent a sus dueños. Determinada en la cantidad de cuatro hryvnias por alma, independientemente de la cantidad y calidad de la tierra, esta colección, destinada al mantenimiento de los regimientos de húsares, se incrementó en 1746 a un rublo por alma, y en 1761 a 2 rublos.