Hotel de estación : un tipo de hotel del siglo XIX, dedicado a las estaciones de ferrocarril y la infraestructura.
Con el desarrollo del ferrocarril , como medio de transporte rápido de pasajeros y de gran capacidad, comenzó a desarrollarse el turismo ferroviario, principalmente accesible a los estratos altos de la población. Las líneas ferroviarias privadas intentaron igualar a este segmento de viajeros erigiendo hoteles de lujo parecidos a palacios en grandes ciudades o lugares pintorescos. Uno de los primeros ejemplos de hoteles palaciegos es el antiguo Midland Grand Hotel (arquitecto Sir George Gilbert Scott) que fue construido por el British Midland Railway en la estación de St Pancras en Londres . A medida que amanecía el nuevo siglo, la Compagnie Internationale des Wagons-Lits, un fabricante internacional de automóviles dormitorio, trabajaba activamente para construir hoteles de lujo en destinos de trenes de lujo. Esta empresa también era dueña del Hotel Pera Palas en Estambul y del Grand Hotel des Wagons-Lits en Beijing .
La construcción de hoteles en nuevas ubicaciones ferroviarias propició la apertura de nuevas rutas turísticas en lugares completamente ajenos al transporte, como la costa este de Florida, ayudado por Henry Morrison Flagler y su Florida East Coast Railway, así como Henry Bradley Plant, cuyo negocio ferroviario abrió la costa oeste de Florida a los turistas.
También es famosa la cadena de hoteles-estaciones del Canadian Pacific Railway, que en la mayoría de los casos se denomina "Châteaus" (Châteaus), por ejemplo, Chateau Frontenac en Quebec o Banff Springs, un hotel en las Montañas Rocosas. Además, la "Comunidad Ferroviaria del Sur" de Austria construyó una serie de hoteles en las estaciones de ferrocarril: el Southern Station Hotel en el paso de Semmering, el Grand Hotel Toblach y el City Hotel en la ciudad de Abbazia (hoy Opatija ) en la costa dálmata, cerca de la ciudad de Rijeka, que hoy día vacío.
Los cambios estructurales en el ámbito del transporte (introducción del transporte individual y desarrollo del tráfico aéreo en el siglo XX) en la década de 1930 provocaron que algunas estaciones hotel-estación suspendieran su actividad o fueran utilizadas para otros fines. Esto afectó a los hoteles St. Augustine y Tampa en Florida, que fueron convertidos en instituciones con fines educativos. En las últimas décadas se ha reconocido la importancia histórica de las estaciones hotel-estación, pero se cuestiona su viabilidad económica.