La teoría de la violencia es una de las teorías más difundidas sobre el origen del Estado y el derecho. Sus partidarios más destacados son el filósofo y economista alemán Eugen Dühring (1833–1921), el sociólogo e historiador estatal polaco Ludwig Gumplowicz (1838–1909), Karl Kautsky (1854–1938) y otros. El principio básico de la teoría de la violencia es que la razón principal del surgimiento del estado y la ley no radica en el desarrollo socioeconómico de la sociedad y el surgimiento de las clases, sino en la conquista, la violencia, la esclavitud de unas tribus por otras. (es decir, se asocia a factores de carácter político-militar).
El factor inicial en el surgimiento del Estado debe buscarse en la fuerza política directa.
K. Kautsky trató de demostrar que con el mayor desarrollo de la sociedad, el estado se transforma en un instrumento de armonía universal, en un órgano para proteger y asegurar el bien común tanto de los fuertes como de los débiles. La teoría fue adoptada por la Alemania nazi como ideología oficial.
Es imposible rechazar por completo la teoría de la violencia no solo por consideraciones formales, sino también sobre la base de la experiencia histórica, que confirma que la conquista de unos pueblos por otros fue un factor real en la existencia del Estado durante un tiempo históricamente largo ( por ejemplo, la Horda de Oro). Elementos de violencia, tanto internos como externos, estaban objetivamente presentes y acompañaban la formación de cualquier estado (romano, antiguo estado alemán, Rus de Kiev). En tiempos más recientes, la violencia directa desempeñó un papel decisivo en la formación del estado estadounidense: la lucha entre el Norte y el Sur esclavista finalmente condujo a la formación de los Estados Unidos. Es claro que estos hechos reales de la realidad histórica sólo confirman parcialmente la verdad de la teoría de la violencia, pero no permiten desconocer sus disposiciones científicas [1] .