La química de altas energías es una rama de la química física que describe los procesos químicos y fisicoquímicos que ocurren en una sustancia cuando se expone a agentes de energía no térmica: radiación ionizante , luz , plasma , ultrasonido , choque mecánico y otros.
La química de alta energía (HVE) estudia las reacciones y transformaciones químicas que ocurren en la materia bajo la influencia de la energía no térmica. Los mecanismos y la cinética de tales reacciones y transformaciones se caracterizan por concentraciones sustancialmente fuera de equilibrio de partículas rápidas, excitadas o ionizadas con una energía mayor que la energía de su movimiento térmico y, en algunos casos, por enlaces químicos. Portadores de energía no térmica que actúan sobre la materia: electrones e iones acelerados, neutrones rápidos y lentos, partículas alfa y beta, positrones, muones, piones, átomos y moléculas a velocidades supersónicas, cuantos de radiación electromagnética, así como pulsos eléctricos, magnéticos y campos acústicos.
Los procesos de química de alta energía se distinguen por etapas temporales en físicas, ocurriendo en un tiempo de femtosegundos o menos, durante el cual la energía no térmica se distribuye de manera desigual en el medio y se forma un “punto caliente”, físico-químico, durante en el que se manifiesta el desequilibrio y la falta de homogeneidad en el “punto caliente” y, por último, el químico, en el que las transformaciones de la materia obedecen a las leyes de la química general. Como resultado, dichos iones y estados excitados de átomos y moléculas se forman a temperaturas ambiente que no pueden surgir debido a procesos de equilibrio.
Una manifestación externa de CHE es la formación de iones y estados excitados de átomos y moléculas a temperatura ambiente, en los que estas partículas no pueden surgir debido a procesos de equilibrio. NE Ablesimov formuló un principio de relajación para controlar las propiedades de los sistemas fisicoquímicos fuera del equilibrio. En el caso de que los tiempos de relajación sean mucho más largos que la duración del impacto físico, es posible controlar la liberación de formas químicas, fases y, en consecuencia, las propiedades de las sustancias (materiales), utilizando información sobre los mecanismos de relajación. en sistemas condensados fuera del equilibrio en la etapa fisicoquímica de los procesos de relajación (incluido el número y durante la operación).