El análisis GAP o análisis de brechas es un método de análisis estratégico que busca pasos para lograr un objetivo determinado.
En certificación, el análisis GAP o auditoría de diagnóstico es una de las herramientas de consultoría. De hecho, es una versión extendida de la auditoría de certificación. Durante su implementación, el consultor-auditor evalúa a la empresa para el cumplimiento de un criterio dado, por ejemplo, la norma ISO 9001 . Como resultado del análisis de GAP, el consultor elabora el llamado informe de diagnóstico: una presentación detallada de cada elemento del estándar: qué cumple la empresa con el requisito, dónde y qué brechas hay, qué debe complementarse, corregirse o cambiado. En esencia, un informe es un estándar (es decir, un criterio de análisis GAP) reescrito en el idioma de la empresa analizada. El informe de análisis de GAP también contiene recomendaciones sobre las mejores prácticas para aplicar un párrafo particular de la norma.
En esta etapa, se recopila la información inicial disponible sobre los problemas existentes para su posterior análisis.
Las declaraciones formuladas en las directrices deben ser lo más detalladas y específicas posible, por un lado, y por otro lado, corresponder a metas globales, una visión global.
Esta etapa le permite evaluar todos los posibles beneficios que se pueden obtener como resultado de tomar ciertas decisiones. Es decir, se está estudiando el “precio de emisión”, es decir, hay una conciencia del tamaño del efecto de la eliminación de brechas y el costo del trabajo para eliminar estas inconsistencias.
En la etapa de planificación, se describe en detalle un conjunto de medidas e iniciativas para cerrar las brechas seleccionadas.
El análisis GAP se puede utilizar para evaluar la preparación de una empresa para implementar un sistema de gestión ambiental de acuerdo con la serie de normas ISO 14000.