Nuestra última hora | |
---|---|
Autor | Martín Juan Rhys |
Género | Literatura científica popular |
Idioma original | idioma en Inglés |
Original publicado | 2003 |
Our Last Hour es un libro de no ficción del astrónomo británico Martin Rees . Título completo del libro: Nuestra Última Hora. ¿Será el siglo XXI el último para la humanidad?
En este libro, dividido en 14 capítulos, a los que se ha añadido una sección de notas finales, Martin Rees examina desde un punto de vista científico una serie de argumentos sobre la posibilidad de la extinción de la humanidad y, de hecho, de toda la vida en el planeta Tierra . , en el siglo 21.
Todos los argumentos se presentan de manera estrictamente científica y están respaldados por conclusiones reales sobre diversas formas sociales, políticas, militares e industriales del comportamiento humano, como guerras, terrorismo, experimentos científicos y tecnológicos, etc. El autor también tiene en cuenta las hipótesis asociadas a desastres naturales destructivos, como erupciones volcánicas o impactos de asteroides.
Todo lo anterior se plantea con consideraciones evolutivas e históricas, acompañado de un análisis de la situación actual, así como de posibles evoluciones futuras de comportamiento relacionadas con el desarrollo de tecnologías en biología, física nuclear , robótica, tecnologías de la información, actividades espaciales, etc.
Así, se asumen todas las situaciones más probables y sus posibles complicaciones asociadas con múltiples variables, siempre con análisis e hipótesis teóricas y científicas [1] .
Finalmente, se tiene en cuenta la posibilidad de que la continuidad de la vida pueda garantizarse mediante los viajes espaciales y la colonización de otros planetas, incluso con la ayuda de robots autorreplicantes que pueden crear condiciones favorables para la supervivencia en entornos hostiles e inapropiados [2] .
La ciencia en el siglo XXI puede cambiar a las personas, no solo su forma de vida. La máquina superinteligente puede ser el último invento hecho por el hombre.
La Guerra Fría nos puso en mayor riesgo de lo que a la mayoría de nosotros nos gustaría. El peligro de una catástrofe nuclear aún se cierne sobre nosotros, pero el daño que podría traer la nueva ciencia es aún más grave.
Dentro de veinte años, el bioterrorismo o el error biológico podría matar a un millón de personas. ¿Qué presagia esta perspectiva para las próximas décadas?
¿Cuántas personas técnicamente talentosas pueden amenazar a toda la sociedad humana?
La ciencia del siglo XXI ofrece perspectivas brillantes, pero también tiene un lado oscuro. Las restricciones éticas a la investigación o el rechazo de tecnologías potencialmente peligrosas son difíciles de aceptar y aún más difíciles de implementar.
El riesgo de grandes impactos de asteroides es mayor que el riesgo de accidentes aéreos, pero los crecientes peligros provocados por el hombre son mucho más preocupantes que cualquier desastre natural.
Los cambios ambientales inducidos por el hombre, aún mal entendidos, podrían presentar mayores riesgos que los desastres naturales representados por terremotos, erupciones volcánicas e impactos de asteroides.
No es difícil imaginar que algunos experimentos puedan poner en peligro a todo el planeta. ¿Qué tan cerca de cero debe estar el riesgo declarado para que se autoricen tales experimentos?
¿Puede la ciencia predecir si los años de la humanidad están contados?
Es posible que algunos Einstein del futuro superen las actuales teorías del tiempo, el espacio y el microcosmos. Pero las ciencias holísticas de la vida y la complejidad presentan misterios que la mente humana nunca podrá comprender por completo.
Puede haber tantos factores adversos que influyan en el surgimiento (y la supervivencia) de la vida compleja que la Tierra es el único hogar de una mente consciente en toda nuestra galaxia. En este caso, nuestro destino tendría un significado verdaderamente cósmico.
Si las sondas y los robots se esparcen por todo el sistema solar, ¿los seguirán los humanos? Las comunidades humanas extraterrestres, si alguna vez existen, serán fundadas por pioneros individualistas dispuestos a correr cualquier riesgo. Viajar más allá del sistema solar es una perspectiva poshumana mucho más distante.