Teoría de la acción comunicativa

La teoría de la acción comunicativa es un  libro de 1981 del filósofo y sociólogo alemán Jurgen Habermas . El artículo presenta la teoría del mismo nombre, dirigida a una comprensión integradora de la realidad social. Según esta teoría, el modelo comunicativo pretende revisar y actualizar el concepto clásico de racionalidad , así como determinar el alcance de la valoración crítica de la estructura social. El ensayo, según la idea del autor, iba a ser la base de una teoría social a gran escala. Habermas continuó desarrollando la teoría en trabajos posteriores.

Estructura de trabajo

Esta obra de Jurgen Habermas consta de dos volúmenes.

Primer volumen

El primer volumen de la obra se denomina "Racionalidad de la acción y racionalización social". En él, el sociólogo, que se dispuso a resistir el ataque a la razón y la ciencia, toca principalmente los temas de la posible "encarnación" del "tema filosófico básico" -la razón y la anti-razón- en las actividades de las personas, sus conexiones, interacciones y formas de vida objetivas. [una]

En esta parte de su obra, Habermas, adhiriéndose a la tradición fenomenológica , formula el concepto de "mundo de la vida" (Lebenswelt): el mundo de la acción, común a todas las personas y dominado en su interacción. Habermas analiza la formación de imágenes y cuadros del mundo desde la aproximación mitológica al mismo, en particular, explorando sus alternativas (apertura-cerramiento; unilateralidad-multilateralismo; egocentrismo-mundocentrismo de la cognición, etc.). El investigador realiza este análisis a partir de los trabajos de Levy-Bruhl , Cassirer y Levi-Strauss .

En general, este volumen se divide en cuatro partes:

Se consideran aquí una serie de conceptos sociológicos-filosóficos (el concepto del "tercer mundo" de Popper , las teorías sociológicas de la interacción, la toma de decisiones, la llamada "sociología de la comunicación", la "teoría analítica de la acción" ( Danto ), etc.) principalmente desde el punto de vista de la visión de la comunicación. Así, al estudiar las acciones desde el punto de vista de la relación de la persona que actúa-"actor" (Aktor) con el mundo, el autor implica tres tipos de acciones: teleológicas (estratégicas), normativas y dramáticas. Habermas ve las diferencias entre estos tipos en las peculiaridades de la relación de una persona con el mundo y en establecer diferencias entre la acción misma y este mundo.

Segundo volumen

El título del segundo volumen de la obra es Crítica de la razón funcional. También se divide en cuatro partes, que se titulan de la siguiente manera:

Este volumen de trabajo presenta un análisis crítico de la teoría del comportamiento simbólico de J. Mead, en oposición a las opiniones de E. Durkheim. Habermas señala la ventaja de este último, que explora no solo los fenómenos de la conciencia colectiva y la acción individual, sino que también plantea cuestiones sobre el desarrollo y la diferenciación de lo "social", que se ve claramente en el concepto de división del trabajo de E. Durkheim. y formas de solidaridad.

Utilizando el material de la filosofía fenomenológica y la sociología de Husserl , Landgrebe , Schutz y otros, Habermas revela las estructuras del "mundo de la vida" a través de la comunicación, demostrando la formación histórica de la oposición de los sistemas y el "mundo de la vida".

Principales líneas de investigación

Habermas lleva a cabo su investigación en las siguientes áreas principales:

Problemas

Uno de los principales problemas planteados en La Teoría de la Acción Comunicativa es el problema del lenguaje. Esto se explica por la propia forma dialógica de la comunicación, que requiere una atención especial al lenguaje, fuera del cual no se pueden estudiar adecuadamente las especificidades de una acción comunicativa. El sociólogo percibe la comunicación misma, en cuyo proceso se revelan los sentidos y significados de las expresiones lingüísticas, como una interacción mediada por el lenguaje.

Otro problema de investigación significativo es el problema del discurso , ya que en él se basa el análisis del condicionamiento social de los enunciados del habla. El discurso, así como la interacción, le parece a Jurgen Habermas una forma de acción comunicativa encaminada a lograr un consenso lingüístico, un acuerdo entre los sujetos de la comunicación, es decir, establecer un equilibrio entre intereses y una distribución simétrica de oportunidades en el acciones de los sujetos de la comunicación.

Notas

  1. Editado por V. S. Stepin. “Teoría de la acción comunicativa” // Nueva Enciclopedia Filosófica: En 4 vols. M.: Pensamiento . — 2001.

Literatura